«No cuentes los días, haz que los días cuenten». Mohammed Ali.
Sumar y contar facturas no son lo mismo que ser un asesor contable. Por un lado, claro está que sumar los datos de las diferentes facturas, ordenarlos y revisarlos, es una actividad que se realiza de forma sistemática dentro de cualquier trámite relativo a la gestión contable. Ahora bien, los términos gestión y asesoría remiten a un nivel de más profundidad, abordando desde el estado de las cuentas… hasta la explicación sobre el mismo, ofreciendo, dado el caso, diferentes opciones para corregir o potenciar el rumbo de la empresa a asesorar. Así, esto de lo que estamos hablando no es tramitación, sino que estamos ante lo que se conoce como asesoría contable.
La gestión o asesoría contable permite organizar de forma clara la contabilidad de una compañía, para que el empresario conozca el estado de sus cuentas a todos los niveles: cuenta de resultados, balance, posición provisional de tesorería, etc. Un buen servicio de asesoría contable permite la planificación óptima de la estrategia de la empresa: proyectos de inversión, planes de expansión, etc., ya que la información que se obtiene de una buena gestión en la contabilidad puede ser analizada con garantías, y permite programar las futuras acciones de forma estratégica y segura.
La asesoría contable constituye, en sus diversos aspectos, un campo de acción dinámico y estimulante, ya que ayuda a conocer y resolver muchos problemas dentro de la empresa. Toda consultora, despacho o asesoría dedicada a este tipo de actividades está -o debería estarlo- obligada a ofrecer a los clientes un servicio de calidad. Por tanto, en primer lugar, se apunta como necesario o imperativo que los asesores realicen una evaluación de las cuentas de sus clientes de forma cualificada, algo que sólo es posible cuando se conocen todos los aspectos y realidades de la empresa.
Para un buen estudio contable, se debe consultar a los clientes sobre aspectos amplios de su negocio, ya que en la actualidad, las empresas precisan minimizar costes, y plantear estrategias de negocio. La actual labor contable debe ofrecer datos de valor para que las compañías puedan realizar estas labores. Por ello, se precisa que el asesor vaya más allá de los tradicionales modelos contables y se adecue a las necesidades del mercado en el que operen sus asesorados.
La pasamos cortita y al pié: se debe de pasar del enfoque tradicional del gestor (mero tramitador de la información contable), a la de asesor, que va más allá (aliado estratégico).
Esto es, porque entre otros aspectos, la asesoría contable permite: crear estrategias en torno a los costes de la empresa, para implementarlas y controlarlas; desarrollar previsiones de tesorería que permitan facilitar la negociación de financiación en momentos de déficit de tesorería; rentabilizar al máximo los superávit de tesorería; realizar proyecciones a futuro para valorar la compañía ante eventuales procesos de venta de la misma, o incluso, ante escenarios de negociación de entrada y/o salida de accionistas. Éstos son solo algunos de los ejemplos, que como es de esperar, en función del caso planteado, aparecerán de una forma u otra.
Somos claros: podemos ofrecerte el servicio de calidad que buscas. Contamos con economistas expertos que ofrecen ese servicio personalizado y adaptado a tus necesidades. Lo mejor es que contactes con nosotros en info@verumasesores.com y concertemos una cita en nuestra oficina. Te estaremos esperando para ayudarte a mejorar.
